Apoyar el derecho a una educación básica de calidad es el objetivo de la última intervención que CESAL emprende en Haití. Un convenio firmado con la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) que nos permitirá, en alianza con la ONGD Nuevo Futuro Navarra, trabajar en 27 escuelas del distrito escolar de Thiotte para garantizar que niños y niñas de 6 a 13 años puedan acceder a una educación de calidad, asegurando su permanencia en el sistema escolar.
El distrito escolar de Thiotte, situado en sureste del país, es una zona rural fronteriza con República Dominicana, con importantes problemas migratorios por la confluencia de personas retornadas del país vecino instaladas en campamentos improvisados. La zona cuenta con altas tasas de abandono escolar y absentismo, especialmente en los meses de siembra y cosecha. Las malas condiciones de las escuelas, la baja formación del profesorado y la consideración por parte de algunas familias de que la educación no es algo importante han hecho a la Asociación apostar por este proyecto.
La intervención de CESAL se articula a través de cuatro ejes: la mejora de las infraestructuras de los centros escolares; la mejora de los contenidos pedagógicos a través de formación, de la elaboración de proyectos educativos y la creación de un Centro de Formación del Profesorado; la mejora de la inclusión y permanencia del alumnado, poniendo especial énfasis en la reinserción escolar de grupos vulnerables mediante la educación de calle; y el apoyo a la participación y descentralización de la educación, fortaleciendo a los consejos escolares y al Departamento Educativo de Thiotte.
El proyecto contempla, entre otras acciones, el reparto de kits escolares para favorecer el acceso de los niños y niñas al sistema educativo, la mejora de los centros en cuestiones como salud, higiene y nutrición, más allá de la construcción de aulas y comedores, y la creación de campañas de sensibilización dirigidas a las familias para concienciar sobre la importancia de la educación.
Esta intervención, que se desarrollará desde ahora hasta diciembre de 2022, es posible gracias a la concesión de un Convenio por parte de la AECID dotado de dos millones y medio de euros, que se verá complementado con un programa a tres años del Gobierno de Navarra dotado con 600.000 euros de ayuda.